Está claro. Vivimos en una época donde los niños «nacen» conectados a internet. Al estar en contacto con todos estos gadgets desde edades muy tempranas, aprenden a usarlos con facilidad. Si los descuidamos, pueden pasar el día entero metidos en ellos y también pueden estar expuestos a contenido no apto para sus edades.
La siguiente presentación aborda dos puntos principales: ¿podemos poner candados de internet para los niños? ¿sirven de algo estos candados?