Yo creo que le vamos a cambiar el nombre a este blog. Ahora le pondremos «Cómo engañar a los niños para que coman verduras». Ya van varias entradas con este tema. Y nos siguen saliendo novedades.
En esta ocasión, unos ingeniosos investigadores de Minnesota les pusieron fotografías de verduras en los compartimentos de las charolas escolares. De esta manera, les mandaban un mensaje «subliminal» a los niños para que en ese compartimento colocaran verduras al momento de escoger comida en la cafetería. Y lo que observaron fue que el día en el que pusieron las fotografías en los platos, los niños efectivamente se sirvieron y comieron un poco más de verduras.
Ésta parece una estrategia muy sencilla que alienta a los niños a considerar comer vegetales. Suena como una buena idea para las escuelas, campamentos o sitios donde se sirven la comida los niños como si fuera un buffet. ¿Y en la casa? mmm… ¿valdrá la pena tenerles platos con separaciones o compartimentos con fotos de los diferentes grupos alimenticios?